Tratamiento de textos. Serie subprocesos gráficos (2)

ÁREA PREIMPRESIÓN. La finalidad del subproceso de tratamiento de texto consiste en preparar el texto de tal manera que cumpla las especificaciones de diseño en relación con el contenido de texto. Incluye tareas tales como la interpretación y marcado de originales, la aplicación de las fuentes establecidas, la elaboración de hojas de estilo de caracteres y párrafos y tareas de corrección ortotipográfica.

Este subproceso se inicia en la recepción del texto sin tratar y termina con la copia del texto tratado dispuesto para tratamientos posteriores. 

El proveedor es el cliente externo o el propio comercial, si bien este último ejerce de intermediario.

Nota: por lo general en las editoriales se especifica en el manual de estilo que el autor entregará el original sin tratar (en formato .txt).

La orden de trabajo, ya emitida, acompaña al original así como opcionalmente los archivos de fuentes a utilizar. La orden de trabajo sirve de referencia con respecto a las especificaciones y puede recoger los aspectos de relevancia  durante el tratamiento.

Este subproceso, dada la evolución tecnológica experimentada en los últimos años, en raras ocasiones se halla en estado puro tal como se describe, por lo general se integra en el proceso de maquetación debido a la evolución de los recursos tecnológicos asociados (de editores de texto a aplicaciones de maquetación) propiciando que el texto se trate directamente en las aplicaciones de maquetación (QuarkXPress, Adobe Indesign,…) y no en las aplicaciones de edición de texto (Microsoft Word, Word Perfect,…).

Para el control de este subproceso sirve una prueba PostScript en una impresora de negro, no obstante, y como es lógico, se recomienda prestar especial atención a las fuentes (utilizar fuentes originales y que éstas se incorporen al archivo).

Recepción de originales. Serie subprocesos gráficos (1)

Iniciamos con esta entrada una serie dedicada a los diferentes subprocesos gráficos asociados a los principales procesos productivos que se pueden hallar en las organizaciones del sector gráfico comenzando por el proceso de preimpresión y tratando de mantener una constancia en la entrega. No obstante, si lo estimamos oportuno, interrumpiremos la serie se para dar entrada a otros temas de interés.

 ÁREA PREIMPRESIÓN. Podemos definir un subproceso en la recepción de originales cuya finalidad consiste en verificar que el original presenta las condiciones adecuadas para la realización del trabajo. Este subproceso se inicia en la recepción y termina con la copia del original dispuesto para su tratamiento posterior.

Debe establecerse un método de custodia del original mientras esté en la organización (independientemente que se sepa que el “original” no es tal sino una  copia y hasta que se libera (se envía al cliente o este indica que no es necesario su devolución). 

Asociada a la verificación deberá existir un registro de visto bueno del responsable de la verificación o del departamento (según se establezca).

Debemos entender por proveedores de este subproceso bien el cliente externo o el propio comercial, si bien este último ejerce de intermediario.

La orden de trabajo, ya emitida, acompaña al original, de tal manera pueda servir de referencia con respecto a las especificaciones y así mismo recoger en la propia orden o en registro asociado, los aspectos de relevancia detectados durante la verificación.

Si el resultado final de la verificación es positivo se procede a realizar la copia de trabajo, el archivo del original y el registro de validación (puede incluirse en la propia orden de trabajo) con lo que quedaría terminado el subproceso.

Reingeniería de procesos

La reingeniería de procesos plantea cambios drásticos de la mejora. Implica repensar los procesos y elaborarlos desde cero frente a la alternativa a la introducción de parches de tal manera que se consigan importantes eficiencias (reducción de costes, eliminación de actividades redundantes o poco productivas, etc.)

A medida que pasa el tiempo, los procesos adquieren un cierto aire de “clasicismo”, con marcada tendencia a la inmovilidad a pesar de que se detecten deficiencias en su funcionamiento. El hecho de que aparezcan nuevas tecnologías y metodologías que deben ser incorporadas a la organización debe marcar el inicio de la reingeniería de los procesos. Los procesos se elaboran a partir de una situación dada por lo que la implementación de nuevas tecnologías y métodos puede ocasionar desajustes importantes en los procesos ya implantados.  

Así la implantación de sistemas MIS (Management Information Systems), dado el cambio que lleva implícito, implica la reingeniería de los procesos puesto que la simple adaptación generaría ineficiencias difícilmente salvables o en todo caso no sacaría el máximo partido a tal tecnología. Situaciones similares provoca la incorporación de las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación), metodologías JIT (Just in Time) o certificaciones específicas del sector como la Certificación Fogra según la norma 12647-2 o la certificación en  Cadena de custodia.

Áreas de mejora en las Artes e Industrias Gráficas. Procesos. 11 febrero

Parte de las entradas incluidas ya en este blog y que se corresponden con sus inicios,  se refieren a los procesos, para definirlos, categorizarlos y controlarlos; parte de las entradas venideras se dedicarán a algún aspecto relacionado con procesos. Así, no es necesario destacar a estas alturas la importancia que tienen los procesos en los sistemas de calidad.

Las áreas de mejora en relación con los procesos en las organizaciones gráficas tienen que ver con su definición e interactuación, la asignación de “propietarios” (responsables) efectivos y su mejora continua.

Es decir, una vez definido un proceso cabe la posibilidad de abandonarse a la inercia propia de dar las cosas por sentadas, sin considerar que, en realidad es a partir del propio momento del establecimiento cuando hay que replantearse las opciones que su mejora puede ofrecer, y esa es precisamente una de las tareas del “propietario” o responsable al actuar como líder en el mantenimiento y mejora del proceso.

La falta de una responsabilidad directa ancla los procesos, los anquilosa, convirtiéndoles en una entidad pétrea con escasa capacidad de ser moldeado y por lo tanto mejorado. A los pocos años se convertirá en algo inamovible, incuestionable, justo lo contrario a la flexibilidad requerida que permita adaptarse a la organización a los cambios.

Para evitar estos males ya se ha indicado la conveniencia de realizar una ficha de proceso (véanse las entradas dedicadas a la ficha de procesos) en la cual se concreten los elementos que lo conforman, este simple ejercicio puede servir para detectar carencias. Aspecto importante es el establecimiento de controles objetivos de procesos asignando los recursos tecnológicos, metodológicos y humanos (en los gráficos que ilustran los procesos incluimos el control en la entrada, en el desarrollo y en la salida) de tal manera que se obtengan los datos objetivos de su eficacia.

En nuestro sector la urgencia de mejora puede parecer más evidente en cuanto que los cambios tecnológicos que acontecen afectan directamente a procesos tradicionales, propiciando, en algunos casos, fusiones entre procesos tradicionalmente separados (diseño y preimpresión), eliminación de procesos (filmación en película, montaje manual) o el planteamiento de nuevos procesos (impresión digital, publicación web).

Análisis DAFO

El análisis DAFO es una herramienta de análisis estratégico ampliamente utilizada por las organizaciones  para  evaluar las debilidades (D), amenazas (A), fortalezas (F) y oportunidades (O) asociadas al proyecto empresarial a medio – largo plazo (planificación estratégica) o a cualquier proyecto que se pueda emprender. Proporciona una visión multidimensional tomando en consideración aspectos positivos y negativos de carácter interno y externo.

Las fortalezas y debilidades son internas mientras que las oportunidades y amenazas son externas.

Más concretamente las fortalezas comprenden los atributos de la organización que claramente pueden contribuir a la consecución de los objetivos. Las fortalezas consisten en poseer un buen “músculo financiero” que permita resistir periodos de crisis (reducción de los pedidos, disminución de las tiradas) o disponer recursos humanos formados, motivados y con capacidad de adaptación (ante las nuevas tecnologías por ejemplo).

Las debilidades son la otra cara de la moneda, al igual que las fortalezas son un factor interno, en este caso negativo y que debe ser considerado antes de emprender cualquier proyecto. Las debilidades son una Dirección poco implicada en actividades de mejora (proveer de los recursos adecuados, obtener las certificaciones oportunas,…) o un personal escasamente formado y motivado que se limita a ejecutar sus tareas de forma pasiva y sin participar en posibles actividades de mejora.

Las amenazas son todos los factores externos que pueden frenar la consecución del los objetivos. Las amenazas más comunes proceden de las actuaciones de la competencia, los cambios legales y los cambios sociales. Que duda cabe que los cambios tecnológicos que se están operando son una evidente amenaza para el sector gráfico (libro electrónico).

Las oportunidades contribuyen, desde el exterior, a la consecución de los objetivos. Las oportunidades se presentan y por lo tanto hay que aprovecharlas (en estos últimos años ha habido empresas del sector gráfico que han sabido sacar partido a la impresión digital: impresión de tirada corta, impresión bajo demanda, impresión de dato variable,…) o se buscan, convirtiendo amenazas en oportunidades (algunas empresas editoriales y gráficas están tomando posiciones para ofertar productos gráficos “editados” no necesariamente “manchados”).

Ciclo PDCA

El ciclo PDCA (en castellano PHVA) es una  contrastada metodología de mejora continua basada en cuatro específicas actividades: Planificar (Plan), Hacer (Do), Verificar (Check) y Actuar (Act). Planteado en su origen por Walter Shewhart, fue ampliamente difundido por Edwards Deming, hasta tal punto que tomó su apellido denominándose en la actualidad además como ciclo PDCA, indistintamente como Ciclo Deming, círculo Deming o Rueda Deming.

El modelo tiene un alto predicamento en los distintos sistemas gestión de la calidad, concretamente en el modelo ISO se incluye en la introducción de la norma 9001, en nota añadida al punto 0.2 enfoque basado en procesos donde se explicita la aplicación de la metodología, si bien sin indicar su origen:

La planificación (Plan) consiste en el establecimiento de procesos y objetivos de tal manera que se consigan resultados de acuerdo con los requisitos establecidos.

La realización (Do) hace referencia a la implementación de los procesos de acuerdo a las especificaciones dadas en la planificación.

La verificación (Check) comprende el seguimiento y la medición de los procesos teniendo como referencia los requisitos (grado de cumplimento) y los objetivos planificados (grado de consecución). Deming sustituyó el concepto Check por el de Study (él lo llamó PDSA), para resaltar que en  esta fase debe prevalecer el análisis sobre lo que se puede entender una mera recopilación de datos, no obstante el modelo se ha quedado con la C de Check.

La actuación (Act) hace referencia a las acciones a realizar a partir del análisis de los datos y la posterior toma de decisiones. El modelo vuelve a empezar rectificando los procesos, modificando los objetivos a partir de los resultados dados y así sucesivamente.

Las siete herramientas de la calidad

Para controlar la calidad se han desarrollado y se vienen empleando diversas “herramientas” que sirven para diversos cometidos todos ellos encaminados al control, desarrollo y mejora de los procesos: clarificar las relaciones dentro del sistema, determinar las causas de los problemas, establecer prioridades en relación con la toma de decisiones.

De todas estas herramientas tradicionalmente se vienen destacando siete, de fácil aplicación y que son ampliamente utilizadas:

–          Diagramas de flujo

–          Plantillas de inspección

–          Gráficos de control

–          Gráficos de dispersión

–          Diagramas causa-efecto

–          Histogramas

–          Diagramas de Pareto

En las próximas entradas iremos describiendo cada una de estas herramientas y su aplicación en el sector gráfico (en algún caso están integradas en los sistemas de control de los equipos de producción).

«In God we trust; all others bring data»

La traducción de la frase viene a ser “En Dios confiamos; todos los demás tienen que aportar datos” y se atribuye a Edwards Deming.

William Edwards Deming es considerado uno de los padres de la Gestión de la Calidad actual. Estadístico norteamericano, fue profesor universitario y trabajó como consejero estadístico para la Oficina de Censo de los Estados Unidos, debido a ello, colaboró tras la segunda guerra mundial en la elaboración del censo en Japón.

Durante los años 50 es invitado junto con Jurán por los japoneses para dar una serie de conferencias sobre el control estadístico de proceso. Estas conferencias despertaron un gran entusiasmo en la industria japonesa que, casualmente, inició el camino para convertirse en potencia industrial mundial.

El dinero que le correspondería a Deming en concepto de derechos de autor por la difusión de sus conferencias, fue donado a la Unión de Científicos e Ingenieros de Japón que a su vez, establecieron un premio en su honor para promover las mejores prácticas en calidad.

En la actualidad, el premio Deming Japonés es uno de los modelos de excelencia más reconocidos a nivel mundial junto con EFQM en Europa y Malcon Balbridge en America.

A Deming se le atribuye el ciclo de mejora continua PDCA (Plan, Do, Check, Act), también conocido como círculo de Deming aunque la idea original es de Walter A. Shewhart (ciclo de Shewhart). La estrategia consiste en seguir un ciclo de mejora basado en la PLANIFICACIÓN, LA REALIZACIÓN DE LO  PLANIFICADO, EL CONTROL DE LO REALIZADO A PARTIR DE LO PLANIFICADO Y LA REVISIÓN Y CAMBIO (NUEVA PLANIFICACIÓN A PARTIR DE LOS RESULTADOS).

Enlaces

Wikipedia:

    Inglés    http://en.wikipedia.org/wiki/W._Edwards_Deming

    Castellano   http://es.wikipedia.org/wiki/William_Edwards_Deming

Premio Deming    http://www.juse.or.jp/e/deming/

The deming institute    http://deming.org/

Elementos de la ficha de proceso (III) Entradas y salidas

Para terminar la serie relativa a la ficha de proceso:

Los recursos humanos son los empleados que comúnmente realizan las actividades del proceso. Estos pueden tener continuidad durante largos períodos de tiempo o, por el contrario, rotar en función de turnos y otras eventualidades.

En el primer caso puede suceder que se asocien demasiado íntimamente procesos con personas, que se establezca un ciclo conservador donde las innovaciones no son bien recibidas, o que se levanten barreras de entrada a nuevos empleados entre otras posibles deficiencias.

En el segundo caso, entre más variación haya en los recursos humanos más necesidad de control de proceso y procedimientos. Mayor necesidad de formación asociada.

 Los recursos tecnológicos son las máquinas y restos de dispositivos necesarios para que el proceso pueda realizarse.

 Las restricciones hacen referencia a los impedimentos o limitaciones tecnológicas o de conocimiento de los recursos humanos (no se puede hacer algo porque la tecnología o la formación no es la adecuada). Las restricciones son limitaciones internas y pueden constituir áreas de mejora.

Los procedimientos comprenden las instrucciones para realizar las actividades, los puntos de control asociados, los documentos y registros que afectan.

Las leyes y reglamentos son documentos externos de tipo administrativo de obligado cumplimiento y que por lo general introducen restricciones al desempeño.  Las leyes y reglamentos constituyen, por lo tanto, restricciones de carácter externo. Su conocimiento es obligatorio, su evolución debe ser prevista.

Los indicadores son valores obtenidos a partir de la aplicación práctica del control de proceso. Bien planificados y establecidos indican el comportamiento del proceso siendo herramienta imprescindible para la mejora continua. Los indicadores deben ser:

–         Constantes,  no variar con el tiempo

–         Pertinentes, la información aportada debe ser relevante

–         Pocos, no conviene perderse en un bosque de indicadores

Elementos de la ficha de proceso (II) Entradas y salidas

Las entradas o inputs son los recursos sin los cuales el proceso no puede alcanzar su finalidad. Por lo general son el resultado final de procesos previos y pueden ser:

–         documentales (ej. orden de trabajo)

–         Productos (ej. formas impresoras)

–         Materias primas (ej. tintas, soportes de impresión, solución de humectación)

–         Recursos complementarios (ej. productos de limpieza, polvos antimaculantes)

–         Recursos energéticos (ej. electricidad)

–         …

El apartado de proveedores hace referencia a los departamentos que proporcionan las entradas al proceso:

–         oficina técnica proporciona la orden de trabajo,

–         almacén proporciona las tintas y los soportes de impresión,

–         preimpresión proporciona las planchas,…

Las salidas u outputs son el resultado final del proceso. Pueden ser:

–         principales (ej. pliegos impresos)

–         secundarias (maculaturas, residuos)

El apartado de clientes hace referencia a los departamentos o empresas a los cuales se les proporcionan las salidas del proceso:

–         el pliego impreso a postimpresión,

–         las maculaturas a empresa de reciclado,

–         los residuos a empresa de recogida