Un objetivo es algo que se quiere alcanzar. Un objetivo de calidad debe ser algo que se quiere alcanzar en relación con el cumplimiento de los requisitos establecidos (sistemas, procesos, productos, servicios), utilizando las herramientas y técnicas aplicadas de la gestión de la calidad.
Un objetivo de calidad por lo tanto, debe diferenciarse de otros tipos de objetivos: financieros, comerciales… o lo que es lo mismo, cada función debe fijarse sus propios objetivos aunque el cumplimiento de los objetivos de la calidad repercuta de manera indirecta en el cumplimiento de otros tipos de objetivos (la reducción de fallos (objetivos de calidad) repercutirá positiviamente en la productividad y por lo tanto en obtención de beneficios (objetivo financiero).
El establecimiento de los objetivos de la calidad son requisitos del sistema (“…se deben fijar acciones para alcanzar los objetivos planificados”, “La documentación debe incluir una declaración de política y objetivos de calidad”, “El compromiso se confirma mediante la comunicación a la organización, la definición de la política y objetivos de calidad”, “Los objetivos de calidad deben documentarse debiendo ser consecuentes con la política de calidad y con la mejora continua”…).
Establecida esta premisa recordemos los requisitos de los objetivos (que en este caso no están establecidos en la norma):
Deben ser específicos, claros, concisos. Que no haya la posibilidad de interpretaciones.
Deben ser medibles. Si no son medibles no son objetivos, son brindis al sol.
Deben ser alcanzables, Si no son alcanzables son una condena para los implicados.
Deben proporcionar ventajas, mejoras frente a la situación de partida.
Deben tener una fecha de consecución, un horizonte temporal.
Deben ser los justos, ni muchos ni pocos.
Deben tener en cuenta el resto de objetivos de la organización.
La definición correcta de los objetivos de calidad, el control de las acciones para su cumplimiento (mediante los indicadores) y su valoración posterior es un ejercicio que se debe realizar mediante los correspondientes planes de mejora continua y debe integrarse en la revisión por parte de la dirección.