Terminada la sesión que dedicamos al diseño con motivo del evento BACK TO MINE del cual ya hemos dado cuenta, continuamos analizando las recomendaciones asociadas a los distintos procesos gráficos.
Más que recomendaciones sobre fuentes lo que analizamos en esta entrada son aspectos de diseño con implicación de textos en el proyecto.
Una primera recomendación consiste en evitar renglones demasiado cortos o demasiado largos.
En ambos casos la legibilidad se resiente por lo que se hace un flaco favor al lector (el referente que siempre debe ser tenido en cuenta).
Además otros problemas se relacionan con el forzado del interletrado en los renglones cortos o la necesidad de excesivas particiones para evitar el efecto. La mecánica más habitual en este tipo de renglones es utilizar la alineación en bandera (en prensa y revista no deja de ser habitual con resultados adecuados).
Los renglones largos también afectan a la legibilidad, en este caso por “aburrimiento” dada la longitud del renglón a lo cual se añade las dificultades de enlace con el renglón siguiente (este caso es atípico en cuanto que los diseños verticales proporcionan renglones adecuados siendo los diseños apaisados los únicos que pudieran tentar al diseñador a plantear una sola columna como elemento “distinto”, “sugerente” e “innovador”).