Existe una amplia variedad de originales resueltos solo a base de textos: múltiples trabajos se componen solo a base de textos y prácticamente en la mayoría interviene el texto en su composición.. Se puede pensar que debido a ello son los que más facilidades proporcionan para su tratamiento.
No obstante a pesar su engañosa sencillez estos deben tratarse con la debida profesionalidad más aún si tenemos en cuenta la relevancia que tiene el texto en gran parte de los trabajos, ya que al fin y al cabo trasmiten buena parte de la información y supone por lo general un mayor esfuerzo de interpretación (lectura continua) por parte del receptor.
Entre las recomendaciones generales hallamos las basadas en los usos y costumbres y a veces contempladas en las normas correspondientes:
Se recomienda utilizar fuentes originales. De hecho la utilización de fuentes no originales puede considerarse delito estando perseguido por la ley. Una fuente es el fruto de un trabajo intelectual y lleva aparejados derechos de autoría (morales y patrimoniales).
Como en raras ocasiones la primera premisa se cumple es normal que haya que trabajar con fuentes de origen incierto por lo que será necesario:
Especificar al preimpresor las dudas con respecto a la fuente.
Aportar la fuente de origen incierto con el trabajo. Esto da margen de maniobra al preimpresor si no dispone de la fuente original (instalándola en su sistema).
Realizar pruebas en impresoras PostScript. Esta prueba es eso, una prueba que utiliza el mismo lenguaje de descripción de página que se utilizará posteriormente en los flujos de trabajo.
El hecho de que el PDF sea el formato más extendido garantiza un alto grado de fiabilidad en aquellos trabajos que no hayan de ser editados (la opción incrustar subconjunto de fuentes está habilitada por defecto) lo cual garantiza su correcta impresión, siempre que no haya cambios. Para editar el PDF, una posibilidad no descartable, es conveniente aportar la fuente completa.
Ante la duda es muy conveniente trazar si es posible (fuentes asiáticas, de fantasía,…) sobre todo en trabajos en los que se incorpore poco texto (cartelería, cubiertas, tarjetas,…)
Un artículo curioso sobre fuentes y derechos de autor es el siguiente:
http://www2.prnewswire.co.uk/cgi/news/release?id=74039
(Nota: partimos de la base de que a un particular no le van a perseguir por un uso ilegal de las fuentes, que es el mismo caso que con la música, pero sí a una editorial como es el caso del artículo citado).