Una fuente tipográfica proporciona los recursos necesarios para que se pueda disponer de una representación visual de los distintos caracteres que la forman. Como mínimo contiene información que permite representar las formas de dichos carácteres (glifos). Las fuentes comparten un estilo común de diseño lo que permite agruparlas por familias las cuales comparten propiedades comunes. Dentro de cada familia, la forma que se muestra para un carácter dado puede variar en cuanto a peso, inclinación, anchura relativas, etc.
Una fuente individual se describe mediante la combinación de este conjunto de propiedades. La propiedades de estilo en cascada (CCS) relativas a las fuentes web se usan para describir una fuente específica y aplicarla a un texto dado, estas propiedades pueden presentar mayor o menor complejidad en cuanto a su despliegue nombre + estilo + color + …
Los recursos utilizados por los user agents -aplicaciones web- que gestionan las disposición y visualización de las fuentes en los distintos dispositivos pueden ser instalados localmente en el sistema en el cual tal aplicación web está ejecutándose.
La información descriptiva requerida para mostrar la fuente adecuadamente se obtiene directamente de tales recursos asociados a dicha fuente. En relación con las fuentes descargables (web fonts -fuentes web) la información descriptiva se halla junto con la referencia a la fuente seleccionada.