Ya desde hace algunos años se están realizando constantes esfuerzos, cada vez más notorios afortunadamente, todos ellos encaminados a la sustitución de los plásticos utilizados en el envase y el embalaje.
Procuraré ir dando cuenta de algún ejemplo que me parezca de interés de lo que se está haciendo y que ya de paso pueda contribuir a la toma de conciencia en este particular. Todos los ejemplos tienen un denominador común y es que implican a la sociedad en su conjunto y su valoración positiva, a las marcas que siguen sus mandatos y a los fabricantes de derivados papeleros en su constante investigación destinado a proporcionar nuevos productos para dar el servicio que a su vez se les demanda.
El ejemplo de ello que trato en esta entrada, es el lanzamiento, unos meses atrás, del nuevo Packaging reciclable por parte de Guillette, conocida marca del grupo Procter and Gamble (P&G), para toda su gama de maquinillas de afeitar recargables.

El material utilizado procede íntegramente de pastas recicladas y de papeles con la certificación FSC (Forest Stewardship Council) y enmarca tal actuación dentro de la propuesta de que en el 2030 («Ambición 2030») todo el Packaging de la marca sea 100% reciclable.
De hecho esta actuación, como otras muchas de otras marcas, trata de responder a las expectativas de los consumidores que vienen expresando en las distintas encuestas al respecto de este tema en un alto porcentaje (con cifras que llegan hasta el 70%) su predisposición a comprar productos con que se presentan en Packaging sostenible (IPSOS survey ).
Esta creciente e imparable concienciación sobre la sostenibilidad hace que las marcas cada vez más pongan el acento en el Packaging sostenible. Así, la reducción de los residuos plásticos procedentes del Packaging se está convirtiendo en una prioridad de compradores y usuarios, de tal manera que debe ser contemplada como un factor clave en la compra y en la fidelización del producto, como así lo están entendiendo las marcas.
Se viene considerando muy adecuada la utilización de la pasta de papel, el papel y el cartón como sustitutos de los plásticos en ese camino hacia la sostenibilidad, puesto que, insistimos, en distintas encuestas a los consumidores que se realizan sobre este tema, hasta el 90% de los mismos están convencidos que el papel y el cartón son materiales fáciles de fácil reciclado.

La caja exterior se realiza con un mínimo de 50% de fibras recicladas y el resto de fibra virgen, mientras que la bandeja contenedora interior del producto contiene hasta un 95% de material reciclado alineándose con los datos de reciclabilidad de la Unión Europea, en la cual el 85,8% de los embalajes de cartón y papel se recicla, lo que convierte a este material en el ejemplo perfecto de la eficiencia de la economía circular.
Se ha de destacar el hecho de que a la utilización de esa alto porcentaje de pastas recicladas, hay que añadir la certificación FSC que garantiza que el restante material papelero empleado procede de bosques gestionados con responsabilidad, manteniendo la cadena de custodia, y confirmando de esta manera las acciones realizadas para preservar el ecosistema, las plantas, los animales y las personas que dependen de tales bosques.
Según las estimaciones de la empresa, y en función de sus volúmenes de venta actuales, esta iniciativa va a suponer la eliminación en Europa de hasta 300 toneladas de plástico en un año, de las cuales aproximadamente 50 millones corresponden a España y Portugal. Nos felicitamos por ello.

Una esperanzadora noticia ver a gigantes de la industria como P&G tomar los mandos del mensaje «100% reciclable» en la presentación de sus productos. Esperemos que la tendencia continúe y la economía circular siga cogiendo fuerza.